Durante invasión japonesa agresores ocuparon Shenyang
cctv.com 09-18-2005 14:45
Tras el incidente del 18 de septiembre, conocido también como el Incidente de Manchuria, el ejército japonés ocupó en poco tiempo toda la parte nororiental de China.
Las ambiciones coloniales de Japón a principios del siglo 20 eran sumamente amplias, pero su primer objetivo fue China.
La intención de Japón de controlar la parte nororiental de China había existido desde los tiempos de la Dinastía Qing. Los estrategas japoneses sabían que tenían que reforzar su presencia en la región para realizar con éxito la invasión total del resto de la parte continental de China. La invasión se realizó con el fin de alejar la atención de los problemas internos confrontados por Japón y para intentar revivir su deprimida economía.
La noche del 18 de septiembre de 1931, los japoneses destruyeron una sección de la vía del tren en una zona de Shenyang que estaba bajo su control. Dejaron abandonados en el lugar tres cuerpos vestidos con uniforme militar chino, como forma de incriminar a las tropas chinas.
Con el pretexto de que debían proteger las propiedades japonesas, las tropas atacaron la guarnición de Beidaying, ubicada en las cercanías.
Los soldados chinos superaban en número a los japoneses por 15 a uno. Pero el gobierno del Kuomintang, cuyo centro de operaciones se encontraba en la muy lejana Nanjing, no les permitió combatir, basado en una política de no resistencia. Los japoneses pronto tomaron la guarnición de Beidaying, de gran relevancia estratégica, incluyendo su importante depósito de armas. Al siguiente día, ocuparon las fábricas de armamentos de Shenyang, apoderándose del equivalente a 225 millones de dólares en materiales de guerra.
Consiguiendo poca resistencia, las ahora bien dotadas fuerzas japonesas tomaron el control de las tres provincias de Noreste de China: Liaoning, Heilongjiang y Jilin.
Editor:Victoria Origen:CCTV.com