El "Congreso de la Juventud Tibetana" es una pura organización terrorista

cctv.com 04-12-2008 13:27

Los recientes hechos violentos del pasado 14 de marzo en Lhasa, que incluyeron golpizas, destrozos, saqueos e incendios provocados, pusieron de manifiesto la naturaleza terrorista del "Congreso de la Juventud Tibetana" (TYC, siglas en inglés) como el planificador directo de los crímenes. La situación creada en Lhasa situó a la organización en la misma línea que otras como Al-Qaida, los terroristas armados de Chechenia y los separatistas del "Turkestán Oriental".

Fundado en 1970, el TYC, que aboga por la "completa independencia del Tíbet", se ha integrado por completo en el "gobierno tibetano en el exilio" y en el núcleo de poder de la camarilla del Dalai Lama, además de participar durante mucho tiempo en actividades secesionistas que persiguen separar al Tíbet de la Patria.

Los discursos de algunos de los miembros importantes de la organización y de la agrupación de seguidores del Dalai Lama mostraron que estaban dispuestos a utilizar el terrorismo para alcanzar sus fines.

El anterior presidente del TYC, Gaisang Puncog, había afirmado que "podemos usar cualquier método con el fin de servir a nuestra causa, ya sea violento o no".

El hermano menor y seguidor del Dalai Lama, Tendzin Choegyal, indicó que "las actividades terroristas podrían lograr el mayor impacto con el menor costo".

Uno de los subordinados más fieles del Dalai Lama indicó en un discurso pronunciado en el Instituto Brookings de Washington que algunos individuos y organismos desesperados podrían desencadenar una situación de inestabilidad a gran escala.

En una de las reuniones de su "comité ejecutivo central" en Dharamsala (India), el TYC aprobó la decisión de "fundar un movimiento guerrillero tan pronto como fuera posible para entrar de manera secreta en China e iniciar enfrentamientos armados".

La organización también diseñó planes preliminares sobre la formación de personal, recaudación de dinero para su financiación y la compra de armas, para entrar en China por la frontera entre este país y Nepal. Algunos responsables de la organización también manifestaron que sacrificarían al menos a cien tibetanos para lograr una "victoria absoluta".

No resulta extraño para una organización terrorista planear un asesinato, tal como demuestran los ataques terroristas del 11 de Septiembre.

En enero, el TYC anunció que pondría en marcha el "Movimiento de Insurrección Tibetana" y estableció un comité con el presidente del TYC, Tsewang Rinzin, como su máximo líder. También comenzaron a impartir formación para los miembros de los movimientos guerrilleros en técnicas de combate y tecnología de explosivos.

Un mes más tarde, en febrero, el TYC puso en marcha campañas en Dharamsala para reclutar a miembros del movimiento subversivo, y entrenar a los principales integrantes de dicho "movimiento".

Lo que hace que el TYC sea una organización terrorista no es sólo lo que declara que harán sus miembros, sino lo que ya han hecho.

La policía en Lhasa ha confiscado más de 100 armas, miles de balas, varios miles de kilogramos de materiales explosivos y detonadores, con pruebas proporcionadas por lamas y civiles.

Estas cifras, además de la muerte de más de una docena de personas en los disturbios del 14 de marzo de Lhasa evidencia que el TYC no es diferente de Al-Qaida, los grupos terroristas chechenos y otras organizaciones terroristas, como los separatistas del "Turkestán Oriental".

De acuerdo con las leyes chinas, las organizaciones terroristas son aquellas que utilizan la violencia como método para amenazar la seguridad nacional, sabotear la estabilidad social, perjudicar la vida de las personas y dañar sus propiedades. Estas organizaciones poseen un grupo líder y también presentan una clara división de responsabilidades para organizar, planear, instigar, implementar o participar en actividades terroristas.

Estas organizaciones también incluyen a personas que han establecido las bases para la realización de actividades terroristas o han reclutado y entrenado de manera sistemática a terroristas, además de colaborar con grupos internacionales de la misma naturaleza, o patrocinar, entrenar y fomentar el terrorismo.

De acuerdo con estos criterios, el Congreso de la Juventud Tibetana puede considerarse como una organización terrorista en todo sentido.

Editor:Yuan Xue  Origen:Xinhua