China publica informe sobre desarrollo económico y social del Tíbet
cctv.com 03-30-2009 17:01
BEIJING, 30 mar (Xinhua) -- El Centro de Investigación de Tibetología de China, con sede en Beijing, difundió hoy lunes un informe integral sobre el desarrollo económico y social del Tíbet, en el que cita hechos y cifras para demostrar los grandes cambios experimentados por la región durante los últimos 50 años.
Todos los autores son tibetólogos experimentados, y elaboraron el documento después de realizar personalmente investigaciones y estudios durante dos viajes que hicieron el año pasado a la región.
Los autores de la obra señalan en el prólogo que su intención es ofrecer una perspectiva integral sobre el desarrollo económico y social del Tíbet contemporáneo, y también una referencia para la elaboración de nuevas políticas relacionadas con el desarrollo de la región.
En 2008, el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita del Tíbet alcanzó los 13.861 yuanes (2.029 dólares), cifra que contrasta ampliamente con los 142 yuanes registrados en 1959, año en el que el gobierno central de China inició la reforma democrática, precisa el documento.
Si bien el guarismo del año pasado fue inferior al promedio nacional (22.698 yuanes), hay que tener en cuenta que el desarrollo económico de la región comenzó desde un nivel muy bajo.
El reporte atribuye el vigoroso crecimiento económico a los pagos de transferencias fiscales por parte del gobierno central y a la inversión en varios proyectos regionales, así como a la asistencia de otras provincias y ciudades interiores más desarrolladas.
Entre 1959 y 2008, las transferencias de las cuentas fiscales centrales al Tíbet sumaron 201.900 millones de yuanes. Sólo para el período 2001-2008, las transferencias totalizaron más de 154.100 millones de yuanes, representando un 93,7 por ciento de los ingresos fiscales de la región durante ese lapso.
"Esto significa que de cada 100 yuanes que gastó el Tíbet, más de 90 provinieron del gobierno central", según el documento.
Respecto a las infraestructuras, la red de autopistas establecida hasta finales del año pasado para unir todos los distritos tibetanos alcanzaba los 51.300 kilómetros. El ferrocarril Qinghai-Tíbet, con una extensión de 1.956 kilómetros, y que entró en operación en 2006, contribuyó de forma considerable al crecimiento de industrias como turismo, automotores, bienes raíces, catering y entretenimiento.
El sector de las telecomunicaciones en la región también ha gozado de un progreso sin precedentes durante las últimas cinco décadas, ya que el número de teléfonos se incrementó de un total regional de 276 unidades en 1959 a las actuales 55 por cada 100 personas.